Mood Food, o la cocina de la felicidad. Es un movimiento gastronómico que busca la felicidad y el bienestar a través de los ingredientes empleados en los platos que comemos. Grandes cocineros como Paco Roncero, Andrés Madrigal, María José San Román, se han adherido en mayor o menor medida a este movimiento.
Carlos Ruiz, joven cocinero propietario del Restaurante Mood Food situado en la C/Comedias nº 5, el cual ya conocemos, amplia su oferta con la apertura de este nuevo local en la C/ Pintor Salvador Abril nº 7 (muy próximo al Mercado de Ruzafa). La intención es mantener ambos locales abiertos.
Al llegar, observamos la presenciq de Carlos al fondo del local, ya que la cocina tiene uno de sus lados abierto al comedor y se puede ver perfectamente el trabajo en cocina. Nos acomodamos en una mesa cercana a ella, particularmente me encanta ver a los cocineros manejarse por su espacio de trabajo.
Como llevaban menos de una semana abiertos, y coincidiendo con las Fallas, habían preparado una carta especial para esos días. Disponían de dos menús, y algo que me gusta mucho, ofrecían medias raciones de bastantes de los platos que había en carta.
Sabedores del buen hacer de Carlos con los arroces, optamos por tomar unos platos al centro y terminar con un arroz. A los postres ya no llegamos, ya que las raciones fueron abundantes.
Patatas Bravas con allioli de ajo asado. Asadas con piel, crujientes por fuera y tiernas en el interior, acompañadas de la salsa de tomate un punto picante y el ajoaceite. Muy sabrosas, nos gustaron mucho.
Ensaladilla rusa, con ventresca de atún y langostinos. Como aficionado de esta tapa, no podía dejar de pedirla. Llega a la mesa acompañada de colines y panecillos tostados.
Ceviche mixto de pescado y pulpo. Otro plato que nos encanta en casa. Sabor equilibrado y suave, tanto en la acidez como en el picante. Se terminó en un abrir y cerra de ojos.
Tartar de atún, acompañado de ensalada. Preparado con aguacate, cebolla morada, alga wakame, aceite y semillas de sésamo.
Arroz de sepia y alacachofas. Tremendo, sabor y más sabor. Punto de arroz acertadísimo.
Estupendo colofón para la comida.
Para beber tomamos agua y cervezas sin alcohol. No pedimos vino.
Terminamos con café y un vino tinto dulce.
Un local que recomiendo visitar para disfrutar de la cocina de Carlos.