Londres 2.011 - 04 de agosto. El día pasado por agua. Camden, Covent Garden y Chinatown

Amaneció el día bastante feo, con lluvia abundante. Este día teníamos pensado visitar Candem, ya que al ser jueves nos libraríamos de los agobios que dicen suceden en fin de semana. Esto lo pudimos comprobar el sábado al visitar Portobello, donde era muy difícil dar un paso debido a la grandísima cantidad de gente que había.

Llegamos a la zona demasiado pronto, a las 9,30h., lloviendo y lógicamente con todas tiendas cerradas. No había un alma por la calle. Queríamos evitar gentío, pero aquello era demasiado pues estaba desierto. La parte positiva era que podiamos hacer las fotos de las tiendas sin gente delante. Luego de llegar hasta Stables Market decidimos irnos y regresar mas tarde cuando estuvieran las tiendas con actividad. Continuaba lloviendo, por lo que pensamos era una buena idea.

Con el metro nos encaminamos hacia la estación de St. Pancras buscando el famoso andén 9 ¾ de las películas de Harry Potter. Salimos del metro y la estación es muy grande y a dos niveles. Empezamos a preguntar y no hay quien nos indique donde está. Nos cansamos recorriéndolas, pues son dos estaciones unidas dedicadas a tráfico nacional e internacional. Recordaba por el foro que estaba al final del andén 9 de la estación nacional, pero al llegar vemos que toda aquella zona está en obras. Al final, un vigilante muy amable nos dice que sí, que sabe dónde está. Está en la calle en la salida junto al andén nº 1 de la estación de recorridos nacionales. Por fin ¡!!. Allá que vamos y vemos una cola de 7 ó 8 personas esperando bajo la lluvia a la puerta de una caseta muy pequeña como de jardín. Si, allí dentro está la pared con el cartel y el carrito. Ahora a la vuelta lo considero una pérdida de tiempo. Hacemos la foto de rigor y decidimos ir en metro hacía Covent Garden ya que la lluvia había disminuido, aunque no había parado del todo.

Por causa de la lluvia, la zona está también bastante vacia. Estuvimos dando una vuelta tanto por el edificio como por Jubilee Market que está al lado, pero como no había ambiente nos encaminamos hacia Chinatown. Son dos calles y al estar lloviendo, la visita quedó bastante deslucida.

Ya estábamos un poco cansados de tanta agua, y decidimos entrar en un típico pub inglés para tomar unas cervezas y comer que habíamos visto cuando veniamos de Covent Garden: The Salisbury, en la calle St. Martin's Lane. Son una serie de pubs tradicionales de una misma cadena que se llama Taylor Walker. En Londres ciudad tienen casi 100 establecimientos. Raciones abundantes, pedimos unos nachos con tres salsas (plato enorme), cuatro hamburguesas, dos pintas, un agua y tres cafés. Nos salió por 68 £

Al terminar de comer, por fin ya no llovía y nos volvimos a dirigir a Camden. Ahora si que había mas ambiente. Entramos en Stables Market donde está la famosa tienda Cyberdog. Dentro, la música a un volumen que hace imposible hablar y con poca luz. Parece más una discoteca. Ropa muy moderna, con colores fluorescentes. Vemos los puestos, paseamos un rato en los dos sentidos viendo las tiendas y nos dirigimos al hotel a descansar antes de salir a cenar.

Por la noche teníamos reserva en el restaurante Inamo, en el 134-136 de la calle Wardour St. en el Soho. Han abierto otro local recientemente en Regent St. Nosotros ¿cenamos? en el original. Aquí os pongo una pequeña descripción del local:

"Este restaurante de comida asiática tiene un curioso sistema para hacer pedidos y para mostrar la carta. En vez de mostrarte la típica carta en papel lo que han hecho es usar las propias mesas donde vas a comer como cartas, ayudadas por un sistema táctil de proyección. Es como si toda la mesa fuera una pantalla interactiva.

Existen unos proyectores encima de cada mesa, en el que se va proyectando platos, bebidas, precios…hasta cuenta con una cámara en la cocina para ver como se preparan los platos. Para hacer la espera de los platos más amena el sistema tiene hasta juegos."

Reservé con antelación por internet en este local para cenar para asegurarnos la mesa. Al final, fue un completo fiasco. Nos tocó el día malo, que le vamos a hacer. Luego de jugar un rato con la pantalla, ya que era una novedad, pedimos tres muslos de pato laqueado y una tempura de verduras. Todo se pide desde la mesa directamente a la cocina.

Al rato viene un camarero y nos dice que nos debemos de haber equivocado, pues tres raciones de pato es mucho. No tengo claro la cara que puse, de tonto o de agradecimiento. Bueno, pues si tres es mucho, pónganos solo dos (os recuerdo que éramos cuatro a cenar). Nos traen la botella de vino, el agua, y al rato las dos raciones de pato. Nos desmiga los muslos y entremuslos y salimos a tres rollitos del grosor de un dedo (delgado) de la mano cada uno. Se creen que pasamos del aire !!!. La conclusión a la que llegamos es que nos les quedaba mas pato, y no tuvieron otra idea que contarnos una mentira. Terminamos los mini rollos, y la tempura sin aparecer. Después de reclamar tres veces y casi media hora aparece la tempura. Estábamos tan enfadados que nos la tomamos y nos marchamos (eso si, pagando. Enfadados pero honrados). Lo mejor de todo, que gané 3-0 al juego de los barquitos. De precio, deciros que no es barato. En fin, una experiencia desagradable.

Luego de cenar, dimos un paseo por Picadilly, viendo las pantallas luminosas y el ambiente del lugar. Nos acercamos a la tienda M&M que han abierto en el mes de julio de este año junto a la plaza. Nos hizo recordar la tienda de NYC en Times Square. Todo lo que puedas imaginar sobre estas chocolatinas se puede encontrar en esta tienda que consta de varias plantas. Al final salimos cargados con una bolsa bien grande de ellas.