Local de reciente apertura, hermano del existente en Madrid desde 2.014. Como indican en la página web del restaurante madrileño, están especializados en preparar pizzas al estilo argentino (masa gruesa y esponjosa) en horno de leña de encina con ingredientes locales y de temporada.
Las pizzas argentinas, como he dicho antes, son de masa gruesa. Se diferencias de las romanas y napolitanas en que las primeras son finas y crujientes, mientras que en las segundas el borde es más grueso aunque el centro no llega al espesor de las argentinas.
Su planteamiento de menú, creí entender al camarero que nos atendió, es tomar primero unos mezzes (entrantes) y después compartir una picsa o tomar una porción. La unidad son ocho porciones y la verdad es que una entera llena bastante. Nosotros fuimos cuatro personas, pedimos dos mezzes y una picsa para compartir (dos porciones cada uno) y ya no pedimos postre.
Ofrecen la posibilidad de medias pizzas o porciones sueltas de algunas de ellas. En cuanto al tema de vinos, ofrecen algunas referencias por copas, tema que se va afianzando en Valencia donde hace un tiempo era bastante complicado tener tal posibilidad.
Situado en la C/Moratín nº 13, muy cerca de la Plaza del Ayuntamiento. No aceptan reservas, hay que tenerlo en cuenta.
Mientras ojeabamos las cartas, unas aceitunas maceradas con hierbas y algo que no era queso aunque lo parece, pero no logro recordar el nombre.
Pedimos dos mezzes porteños al centro: Vitel Toné. Aguja asada fría con salsa de anchoas y atún. La cocción de la carne parecida a un roastbeef. Plato acompañado de unos picos de rosquilleta. Sabroso.
Ensalada completa. Verduras de temporada y ventresca de bonito. Buena calidad del producto.
Como principal una Picsa de papada de cerdo ibérico y alcachofas. Tomate, su mezcla de quesos, papada ibérica Carrasco, alcachofa, y alcaparras. Esponjosa y muy sabrosa.
El precio de esta pizza es de 26 €. Algunas personas con las que lo he comentado me dicen que es caro. Hay que tener en cuenta que con dos porciones ya te quedas bien y una completa son ocho trozos. Y existe la posibilidad de pedir media o porciones sueltas como he comentado antes. Al ser gruesa, cunde mucho la masa y llena mucho más que las de masa fina.
Para beber, 4 copas de vino y un agua. Con dos cafés la cuenta subió a 52 €, que para cuatro personas sale a 13€/comensal. No lo considero para nada descabellado.
Recomendable para probar algo distinto...