Mini tosta de salmonete con mermelada de tomate.

Una tapa sencilla de preparar y muy sabrosa. 



El salmonete es un pescado que gusta mucho en casa gracias al sabor de su carne. Lo malo es la gran cantidad de espinas que tiene que a la hora de comer nos pueden molestar.  


Limpiamos y fileteamos los salmonetes. Con la ayuda de unas pinzas y mucha paciencia quitamos todas las espinas que veamos. Envolvemos en film transparente y congelamos durante 24 h. para asegurarnos de actuar contra el anisakis, pues luego lo tomaremos casi crudo.



A la hora de montar el plato, primero descongelamos los lomos de pescado. Los pasamos durante unos segundos, con la piel hacia arriba, por una plancha muy caliente con una gota de aceite. Pintamos la piel con un poco de aceite ayudándonos de una brocha. Resaltará el bonito color de su piel.

Sobre un pan tostado crujiente, extendemos un poco de mermelada de tomate y encima colocamos el salmonete.




Solo nos resta añadir lo que nos guste para decorar. En esta caso polvo de quicos (maíz frito triturado), pistachos picados, y semillas de Chía (Salvia hispánica). Unos germinados y unas hojas verdes pequeñas también quedarían perfectas.

Buen provecho !!!