Restaurante Bon Aire, El Palmar (Valencia)

Cuando me dijeron si quería ir al restaurante Bon Aire de El Palmar no me lo pensé. La verdad es que tenía muchas ganas. El restaurante de Raúl Magraner y su esposa Rosa Roig tienen merecida fama por sus arroces. Nada más y nada menos que son los ganadores del Concurso Internacional de Paella de Sueca 2.018 y el I Certamen Internacional Alicante Ciudad del Arroz. Dos premios que dicen mucho del local y su cocina. Curriculum no les falta.



La apertura del restaurante fue en 1982, por parte de los padres de Rosa. En estos momentos, con mas de 35 años de historia lo regentan el matrimonio junto a toda su familia.

Ahora el negocio familiar ha realizado un cambio de imagen y adopta el lema de Bon Aire, Arròs y Tradició. Nuevo logo, web, y decoración del local. Pero ojo, manteniendo la cocina con sabor, con tradición y apego a la tierra donde nacieron.





Empezamos por un potente "allioli" y tomate rallado con unas finas rebanadas de pan tostado que nos fueron «abriendo la gana» como se dice aquí.


"Esgarraet" de Llisa (Mujol). Un plato que tienen en carta mas de 30 años, y que como me comentaron proviene de la cocina de aprovechamiento de aquellos tiempos. El pescado cocinado desmigado, pimiento asado, y cebolla tierna.


Una ensalada de tomate de la zona (que bueno estaba). acompañado solamente de láminas de ajo crudo y un buen aceite de oliva, dieron paso a dos platos elaborados con Carpa y que no había probado nunca. Una Mojama elaborada en el restaurante y un revuelto de las huevas de este pescado. Dos platos interesantes que me encantó conocer.




No podía faltar el "all i pebre" de anguila, para eso estamos en el medio de La Albufera. Sin patata, solamente la anguila y su salsa que reclamaba mojar pan sin parar.


Y llegaron los arroces. Dos. Primero una Paella Albufera (como lo tienen indicado en carta) de lubina, anguila , coliflor y ajos tienos para terminar con una Paella Valenciana con pato. Pollo, conejo, caracoles y pato, además de la verdura correspondiente. Arroces de campeonato, dignos de un primer premio.





Paella Valenciana con pato.




A estas alturas poco hambre teníamos, pero no pudimos renunciar a los postres caseros que nos ofrecieron. Y para rematar, un "cremaet".




Junto al menú, tuve también la ocasión de probar Malferida, el nuevo refresco de cola valenciano elaborado con ingredientes naturales y sin azúcar. Inspirado en una historia de Aielo de Malferit, ciudad que reclama ser la cuna de los refrescos de cola. La verdad es que fue una comida de descubrimientos interesantes.